En agosto de 2022 se registraron 23 homicidios en Medellín. Este es el mes con menos homicidios de 2022 e inclusive de los últimos 40 años. Con respecto a julio de 2022, la reducción fue 32,4 %. Con los casos de este mes, en total han ocurrido 256 homicidios en 2022, según la información del SISC, una reducción de 5 % al compararlo con el mismo período del año anterior.
Esta reducción, característica de los últimos tres años, es consecuente con la reducción gradual pero continua que registra la violencia homicida en Medellín y que solo es interrumpida en períodos específicos en los que se desatan las confrontaciones entre grupos armados en la ciudad. A pesar de que los ciclos violentos cada vez lo son menos, el homicidio en Medellín sigue siendo un fenómeno de gran preocupación, al compararlo con otras ciudades que comparten características similares, y al tener en cuenta la concentración de esta violencia en términos espaciales y de características de las víctimas.
Los 256 homicidios representan un homicidio diario en promedio en la ciudad. Al tener en cuenta los rangos etarios de las víctimas, se encuentra que 8 víctimas tenían entre 14 a 17 años (3 %). Las principales víctimas son aquellos jóvenes que se encuentran entre los 18 y los 24 años (75 homicidios, 29 %), y los jóvenes adultos (25-28 años) que ascienden a 35 víctimas (14 %). Entonces, los jóvenes de la ciudad de Medellín que representan, según el censo del DANE, el 23 % de la población, ascienden al 46 % de los homicidios registrados. Esta concentración violenta que parece naturalizada en el imaginario de la ciudad y que estigmatiza espacios de interacción de adolescentes y jóvenes de borde, es la que estudia el libro Ciudades Sin Miedo, publicado en el año 2022 por Casa de las Estrategias.
Las mujeres son otro segmento poblacional afectado por la violencia. En lo corrido del año se han registrado 19 víctimas, las cuales, como se resalta en nuestro análisis de feminicidios, son asesinadas en entornos precarizados, y además tenían relaciones de cercanía con los victimarios. A pesar de que en muchos de estos casos no hay una relación directa con las dinámicas delincuenciales de la ciudad, es innegable, como ha mostrado recientemente Casa de las Estrategias, la relación transversal que existe entre las dinámicas violentas de la ciudad, el acceso a armas de fuego y cortopunzantes y los feminicidios que allí se registran.
Otros grupos que son vulnerables a manifestaciones violentas en Medellín tienen concentraciones de homicidios que son motivo de alerta para las instituciones encargadas de reducir la violencia; y para las organizaciones que trabajan, desde las manifestaciones ciudadanas, en la desnaturalización de los homicidios. En lo corrido del año, con una disminución a partir del segundo semestre, se registraron 10 homicidios de personas pertenecientes a la población LGBTI, un incremento de 67 % con respecto al año anterior.
Los habitantes de calle son otro de estos grupos vulnerables. Estos ascienden, según las imprecisas estimaciones que se tienen a disposición, a un total de 8.000 (ocho mil) personas en Medellín (aproximadamente 0,31 % de la población). A pesar de su reducido porcentaje, se han registrado al menos 23 homicidios de habitantes de calle en 2022, una reducción con respecto a 2021, pero en términos porcentuales, 9 % del total de las víctimas de 2022. Es decir, una de cada diez víctimas de homicidio en Medellín era habitante de calle.
Con respecto a la concentración de los homicidios, la comuna de La Candelaria sigue siendo aquella donde se concentra la violencia homicida. En 2022 se han registrado allí 53 casos (21 %), esta comuna ha sido, desde que se tiene información una de las comunas más violentas de la ciudad, tanto en términos de homicidios como de feminicidios. A esta la siguen Aranjuez con 25 casos (10 %), Robledo con 23 casos (9 %) y San Javier con 21 casos (8 %). Aproximadamente la mitad de los homicidios ocurrieron, entonces, en 4 comunas de la ciudad. En agosto, las comunas más violentas fueron Santa Cruz, Robledo y La Candelaria.
Finalmente, los barrios más violentos durante el año 2022 han sido Estación Villa de La Candelaria con 13 casos, La Candelaria de la misma comuna con 8 casos; así como los barrios Área de Expansión Pajarito (San Cristóbal), Prado (La Candelaria), Antonio Nariño (San Javier), el Área Urbana de San Antonio de Prado, Robledo (comuna Robledo) y Sevilla (Aranjuez) con cinco casos cada uno de estos barrios.
